LA GRAN DEUDA DE ELECTRICARIBE

lunes, 07 de septiembre de 2020 a las 07:00 AM Columnas

El nuevo insulto de Electricaribe a los usuarios de su pésimo servicio de energía llegó con la demanda, que de manera descarada, interpuso la empresa a la ciudad de Barranquilla, exigiendo 45 mil millones de pesos por el pago del consumo de energía en barrios subnormales. Una desfachatez sin límites.

No es justo que a unos días de la fecha en la que por fin nos vamos a librar de Electricaribe, ahora nos llegue este nuevo cobro, que ofende a quienes por años hemos sufrido con el mal servicio y las altas tarifas. El recaudo por más de $200 mil millones que pretende realizar la compañía con los cobros a otras alcaldías de la región, muestra la ambición de quienes están detrás de este gran negocio.

El malestar de la comunidad ha aumentado con los lamentables sucesos de los últimos días que involucran: la triste muerte de un adulto mayor al que inhumanamente le suspendieron el servicio de energía sin importar que estuviera conectado a una bomba de oxígeno para mantenerse con vida; también la trágica muerte de una joven madre que falleció al caerle una guaya encima, cuando iba caminando con su familia; y la caída de un cable de alta tensión que dejó con graves quemaduras a un menor de doce años. Así como estos dolorosos casos, son innumerables las víctimas que ha dejado Electricaribe en sus años de mal servicio en la Costa.

La indiferencia e insensibilidad con la que Electricaribe maneja estos hechos es indignante. La falta de respuesta es una de las quejas más recurrentes por parte de las familias de los afectados, a quienes en la mayoría de los casos se les han vulnerado sus derechos. Confiamos en que los procesos judiciales que han iniciado las nuevas víctimas, prosperen y establezcan un precedente para que no vuelvan a presentarse situaciones como estas, en las que la empresa no reconoce su responsabilidad.

Que el Tribunal Administrativo del Atlántico fallara a favor de Electricaribe en el recurso de insistencia que interpusimos para que se nos suministrara la información sobre el monto de su comercialización y venta, nos limita en el ejercicio del debido control político. Es contradictorio que no tengamos el derecho de pedir información a una empresa a la que los colombianos le hemos entregado más de 10 billones de pesos y le seguimos dando nuevos recursos. Si todo ha sido tan transparente como ha dicho, en los medios de comunicación, ¿Por qué la Agente Especial de Electricaribe, Ángela Patricia Rojas, nos ocultan el monto de la transacción?, probablemente porque existió un detrimento patrimonial con la venta de Electricaribe por un valor muy por debajo al costo real.

Desde la Bancada Caribe del Congreso de la República, hemos expresado nuestro rechazo a las pretensiones perversas de reclamar este pago de miles de millones de pesos a los usuarios de la Costa, que tanto hemos padecido por la mala calidad en la prestación del servicio, los altos costos del consumo, los daños en las redes y lo peor de todo: la irreparable pérdida de vidas humanas.

Aún sin conocerse todos los compromisos que realizó el Gobierno en la venta, no hay duda de que los colombianos tendremos que seguir entregando dineros que nunca se van a recuperar. Así que si hablamos de deudas, la mayor deuda la tiene Electricaribe con los colombianos, especialmente con sus usuarios del Caribe.