COLUMNA DIARIO LA REPÚBLICA

miércoles, 28 de octubre de 2020 a las 06:00 AM Publicación

Las múltiples inquietudes entorno a la realidad actual del gas natural y GLP en Colombia motivaron el debate de control político que realizaremos próximamente en la Comisión Quinta del Senado de la República, para que el Gobierno Nacional en cabeza del Ministro de Minas y Energía y los directores de las entidades adscritas al ministerio, entreguen respuestas claras acerca de la situación del sector, y además expliquen cuáles han sido las políticas adoptadas o que se están diseñando para reactivar la industria del gas natural e impulsar la economía en Colombia.

Como respuesta a la constante incertidumbre sobre la oferta y la demanda, que impera en la industria del gas, y las opiniones en contravía manifestadas por los diferentes actores del sector en relación con las propuestas del Gobierno Nacional para que se garantice el suministro de este hidrocarburo, identificamos cuáles son los principales interrogantes acerca del futuro del Gas en Colombia, que generan intranquilidad, para que sean resueltos ante el país en este debate.

Al revisar el plan de abastecimiento de gas natural formulado por la Unidad de Planeación Minero Energética (UPME), para asegurar el abastecimiento y confiabilidad en el suministro de gas durante los próximos diez años, se reafirma nuestra preocupación ante un nuevo aumento en las tarifas de gas natural para los usuarios residenciales, producto de la importación, que se plantea como la principal alternativa por parte del Gobierno para evitar un posible escenario de escasez de este combustible.

Apelando a la incertidumbre, sin tener en cuenta la oferta ya existente y con errores en las aproximaciones de la capacidad de producción de gas natural a la demanda, la UPME le da la espalda a la producción nacional y justifica la construcción de la nueva planta Regasificadora del Pacífico, que no sabemos si finalmente se va a utilizar. Por ello, la insistente propuesta de realizar esta obra es objeto de un sinfín de cuestionamientos que no hallan respuesta en las justificaciones emitidas por el Ministerio de Minas y Energía para su construcción, que le costaría a los colombianos más de 800 millones de dólares.

Algunas evidencias como el estudio sectorial “Viabilidad de la construcción de una Planta de Regasificación en la Costa Pacífica”, realizado por la Contraloría General de la República, que al referirse a la actual planta regasificadora de Cartagena señala que: “…el incumplimiento e indisponibilidad de la planta regasificadora para suministrar el combustible, sigue cuestionando su razón de ser y capacidad de almacenamiento y regasificación, además no se explica por qué la regulación les permite destinar un porcentaje para entregar el GNI a usos diferentes al de las plantas térmicas”, ponen en duda la verdadera conveniencia y necesidad de una nueva planta en el país, justificando nuestra preocupación.

Adicionalmente, hemos solicitado que en este debate se nos resuelvan interrogantes como: ¿Cuál es el estado actual de las reservas de gas en el país?, ¿Cuál ha sido el impacto de la actual crisis originada por la pandemia del Covid-19 en la industria de gas natural en Colombia?, ¿Cuál ha sido el aporte de la industria y las medidas a los usuarios en esta crisis?, ¿Qué incentivos para la exploración y producción nacional de gas natural se han puesto en marcha?, ¿Cuántas áreas se encuentran actualmente en exploración y explotación de gas natural en Colombia y cuál es su producción actual y futura?, ¿En qué condiciones están los prospectos para nuevas áreas de exploración y explotación de gas natural?, entre otros.

El país exige conocer la situación actual del gas natural y GLP, saber cuáles son las probabilidades reales de disponer de nuevos volúmenes en el corto plazo, las expectativas de incremento de la oferta de gas natural en el mediano plazo y las alternativas diferentes a la importación para diversificar las fuentes de producción sin desatender la demanda. Necesitamos que se impulsen propuestas con las que se busque disminuir las necesidades de importación de gas y que favorezcan la producción nacional.

Publicada en La República