Poco le duró al gobierno la intención de asumir, con recursos de la nación, la deuda de 5 billones de pesos que tienen los colombianos con las empresas comercializadoras por concepto de opción tarifaria. El anuncio realizado por el mandatario en la ciudad de Barranquilla suscitó tanto expectativas como interrogantes por igual, de un lado estaba claro que al pagar la deuda se daría un primer paso para lograr la reducción de las tarifas actuales, pero por el otro eran muchas las inquietudes que existan alrededor de la propuesta y su sustento legal. Finalmente, a los días el ministro Camacho dio el reversazo diciendo que solo se le iba a dar prioridad al pago de los saldos de los estratos 1, 2 y 3. Otra vez se prometió algo que no se cumplió.
El malestar, sobre todo en la región Caribe, que acumula casi un 50% de la deuda, no se hizo esperar. Deberíamos decir que: ¿Nos sorprende? Pues lastimosamente no. Muchos han sido los intentos que por ligeros y sin una base técnica se han caído sin llegar a feliz término y mientras tanto continua el atentado contra el desarrollo económico y el bienestar social en el Caribe.
No olvidamos los paupérrimos resultados logrados por el llamado “Pacto por la Justicia Tarifaria”, que fue una desilusión enorme. ¿Se vuelve a repetir la historia? Para colmo de males, la Asociación Nacional de Empresas Generadores (Andeg) anunció un nuevo incremento del 3 % total del valor de la tarifa, por el concepto de generación durante el fenómeno de El Niño, cuando las térmicas trabajaron en su máxima capacidad. Así las cosas, mientras que, por un lado, se intenta bajar, por el otro se sube. Se da un pasito Pa'; Lante y tres para atrás, entonces nunca llegaremos a una disminución en el precio del kilovatio.
Somos conscientes del estrecho margen de maniobra que hay para mitigar esta crisis, aun así, son varias las medidas que puede adoptar el gobierno para frenar las continuas alzas en las tarifas de energía, entre ellas están: establecer un límite en las ventas en bolsa a los generadores; tumbar el cobro retroactivo por concepto por pérdidas no técnicas de energía, que ha derivado en un incremento acumulado de la tarifa plena en el Caribe; realizar las inversiones de infraestructura eléctrica que requiere la región; y por supuesto pagar la deuda de opción tarifaria.
Le pedimos al Señor presidente, que esta vez le cumpla a los 11 millones de usuarios de la Costa Caribe y a los colombianos de las otras regiones del país, expidiendo un Conpes para titularizar la deuda completa por opción tarifaria, el gobierno tiene en sus manos la posibilidad de bajar las tarifas entre un 15 % y un 20 %, de manera inmediata. Necesitamos verdadera voluntad y un esfuerzo real.