UNA APROPIADA MODERNIZACIÓN DEL SISTEMA ELECTORAL

lunes, 10 de agosto de 2020 a las 07:00 AM Columnas

La modernización del sistema electoral es una asignatura pendiente en Colombia, que no se puede seguir aplazando, mucho menos ahora, ante la nueva realidad que nos ha traído la pandemia mundial. Desde la virtualidad del Congreso de la República, estamos listos para realizar una discusión rigurosa y juiciosa a la propuesta de actualización del Código Electoral, con el propósito de entregarle al país una reforma que responda a las necesidades actuales y garantice la democracia.

Ante la espera de la radicación del proyecto de reforma al Código Electoral por parte de la Registraduría Nacional del Estado Civil, que se realizará en los próximos días en el Congreso, son muchas las voces que desde ya se expresan a favor y en contra de las distintas propuestas de adecuación y modernización del proceso electoral en Colombia. Un debate que sabemos será extenso pero del que esperamos consensos para lograr una verdadera reforma integral del sistema.

Actualmente, tenemos un viejo código del año 1986 que es necesario actualizar y adaptar a las modificaciones constitucionales que aún no se han logrado implementar. Uno de los puntos de la reforma electoral que siempre ha generado gran discusión y que debido a la pandemia por el COVID-19 ha resurgido con mayor fuerza, es la implementación del voto electrónico en el país. Aunque este no es un tema nuevo, por distintos motivos este sistema de votación no ha logrado ver la luz en Colombia.

En el año 2004, con la Ley 892 se ordenó que la implementación del voto electrónico en Colombia debía empezar a realizarse antes del 2009, sin embargo esto no se materializó. Más tarde en 2011, la Ley Estatutaria 1475 en el artículo 39 estableció una vez más la implementación del nuevo mecanismo electrónico de manera gradual, con el fin de garantizar agilidad y transparencia en las votaciones. Y otra vez se volvió a incumplir.

Ante la expectativa e incertidumbre por los resultados de las elecciones atípicas que se desarrollarán el próximo 30 de agosto en cuatro municipios de Cundinamarca, Magdalena, Bolívar y Nariño, no podemos ignorar que de haber tenido avances en la implementación del voto electrónico o en la propuesta del voto anticipado, la preocupación por el abstencionismo durante la jornada democrática sería menor.

El mundo y la forma de ver la vida ha cambiado luego del confinamiento al que nos hemos sometido durante los últimos meses por la llegada del Coronavirus, obligándonos a modificar comportamientos y acelerar procesos como los digitales que en muchos sectores eran nulos. Esta pandemia nos sigue exigiendo cambios, entre ellos la urgencia de implementar una adecuada reforma al código electoral, que se ajuste a la nueva realidad que estamos viviendo y sus exigencias tecnológicas.

De acuerdo a los anuncios realizados por el Registrador Nacional, Alexander Vega, el proyecto de reforma al Código Electoral que llegará al Congreso con mensaje de urgencia por parte del Gobierno, promete estar ajustado a las nuevas tecnologías, utilizando como llave electrónica la cédula de ciudadanía para el voto digital, así como la aplicación de un nuevo censo electoral, la ampliación de la jornada, hasta las 5 p.m., el voto anticipado, el voto electrónico mixto, la modificación a los escrutinios e inscripciones, entre otros.

El pasado jueves conté con el honor de ser elegido como nuevo Presidente de la Comisión de Vigilancia al Organismo Electoral del Senado de la República, que entre otras cosas, es la encargada de vigilar el cumplimiento de las disposiciones constitucionales y legales sobre el Organismo Electoral Colombiano, es decir, que tendremos la gran responsabilidad de estudiar a profundidad y de manera juiciosa este proyecto de reforma que urge en el país.

En el Congreso de la República, tenemos el gran reto de entregarle a los colombianos, una nueva Reforma al Código Electoral que no solo logre la modernización de los procesos electorales sino que también disminuya la abstención, le de legitimidad al procedimiento electoral y además garantice y revitalice la democracia del país.